Zona de coincidencia con el cliente «Ubicaciones no cubiertas por tus otras zonas»
“Todo por una estafa” se ha añadido a tu carrito.
Ver carrito
DigitalProducto para Descargar
Hacer sapito
V.V.Fisher
Hacer sapito es una serie de poemas que trabaja con repeticiones, encabalgamientos y una sintaxis rota que desacata normativas hegemónicas para mostrar los modos de inscripción de la violencia en los cuerpos, en particular, la que se inscribe en los cuerpos de las mujeres al ser nombradas dentro de un discurso masculino patriarcal. Victoria Cóccaro.
Homo Inc.Orporated
Sam Bourcier
Matrimonio, procreación, trabajo, patria… los gays y las lesbianas se trasladaron a la esfera de la reproducción y la producción. ¿Qué queda del sujeto político LGBT cuando es definido por el derecho y el management de la diversidad? No mucho. Por eso, l*s queers y l*s transfeministas se movilizan por una agenda de redistribución económica y de justicia social, más allá de la simple demanda de igualdad e integración.
No soy un bombero pero tampoco ando con puntillas
Alejandra Sardá - Silvana Hernando
No soy un bombero, pero tampoco ando con puntillas está dividido en cuatro partes. La primera reúne las historias de Julia, Cachita y Teresa, nacidas en la segunda y tercera décadas del siglo XX. Ángela, Carmen, Mónica, Paloma y Valeria, nacidas en la década de 1930, forman la segunda parte. La tercera concentra a las nacidas en la década de 1940: Ana, Juana, Marina, Rosita y Viviana.
Nuestra intención es abrir una puerta que lleve a todas las voces que aquí no están representadas. Una puerta por la que se deslicen nuevas preguntas, nuevas relaciones, nuevos significados. Una puerta por la que todas las personas sigamos recobrando y celebrando las historias de vida de mujeres que aman a otras mujeres.
Orlando
Orlando es una obra basada en la vida de la íntima amiga y amante de Woolf:
Vita Sackville-West.
Una novela alegre y amorosa que parodia las típicas biografías de la época, pero además se presenta como un manifiesto feminista al tratar temas como la homosexualidad, el lesbianismo, el papel de la mujer en la sociedad y la mujer creadora literaria.
Si Evita viviera – Antología de poesía lesboperonista
Si Evita viviera… sería tortillera. Esa fantasía en condicional suelta una lengua lesboperonista llagada y festiva. Evita, la infinita. No hay flores que alcancen para despedir a la que vive entre nosotres. La máquina de Evita coce, tal vez sin proponérselo, fantasías desobedientes. Contra la ascepsia de la época, anima “el desbaratado deseo de compartirlo todo”. Porque nos gusta imaginar que Si Evita viviera construiría lesbiátricos y sancionaría una Ley de Reparación Histórica para cada uno de los orgasmos truncados por la moral sexual represiva que custodia la heteronorma. Complicidad con las obreras de la desobediencia, los infiltradores de posibilidades, tanteadores de desvíos, militantes de la Asignación Universal por Fiesta. Evita contra el hambre y contra el Hombre que se escribe con mayúsculas. Evita, la ex de mi ex, “corazón de pueblo”, amiga corajuda, amante del riesgo; la que lanza “un gran orgasmo de sudor cabeza”.
Rocío Feltrez (Sudor Marika)
Comp. Gabriela Borrelli Azara
Todo por una estafa
Carolina Balderrama
Como quien no cree que existe la posibilidad de ser una vencida en - y por - el amor, Carolina Balderrama recorre los espacios más íntimos de un comienzo, un durante y un final, dejando en su camino poesías. Como quien solo cree en el orgullo que trae tomar el riesgo a pesar de la partida, a pesar de la distancia, a pesar de la estafa, estos poemas son un sí rotundo a aceptar a unx otrx aguerridamente. Sin abandonarse a sí misma, sin traicionar su léxico, visto como indisciplinado por los porteños, quienes, negando la polifonía del lenguaje, le exigen que corrija su "io" santiagueño para escribir un "yo" que no le pertenece.
En pleno bullicio por la realidad política, social y económica en la que toma absoluto partido, unx asiste a un verdadero interior que no se rinde en el caos sino que, entre las flores de la casa, las banderas de la calle y los cuerpos transpirados, se subleva en él.
Florencia Kirchner
